Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como política forestal

La Pedroche

Imagen
Cuando yo era un crío mis padres en la Nochevieja, tras cenar con nosotros en casa, salían al añorado Bar Iñaxi comandado por el mítico JoxeMari Ezeiza a comer las uvas y tomarse sus copitas de cava mientras nosotros, los tres hermanos, nos quedábamos en casa viendo en la tele un programa que nosotros creíamos era en directo pero que, al parecer, estaba enlatado meses antes. Ahora, a pesar de lo que ha avanzado la tecnología, la tele sigue ofreciendo una gala musical enlatada tras una dura y competida campanada donde, lamentablemente, siguen destacando los vestidos (por llamarlo de alguna forma) de la Pedroche que, enseñando muslamen, tiene su patético pero glorioso momentico en el audímetro. Parece mentira que en pleno siglo XXI, una cadena tan correcta y respetable como Antena 3, siga recurriendo a semejantes recursos y nadie se escandalice. ¿Qué ocurriría si en vez de Antena 3 fuese la Trece de los obispos? ¿No les recuerda a las célebres mamachichos de Berlusconi? En fin,

Los ojos como platos

Imagen
Me cabrea sobremanera comprobar cómo mis convecinos progres, término que muchos de ellos utilizan para autodefinirse, llevan una holgada vida, como dirían ellos, de “derechas” y se contradicen, día sí y día también, entre la teoría que predican (el corazón a la izquierda) y la práctica que ejecutan a diario (la cartera en el bolsillo trasero derecho). No es que yo esté libre de incoherencias pero lo que no admito son las incoherencias de aquellos que van dando lecciones de cómo tenemos que vivir, consumir, pensar, etc. Nos tachan de pijos a los que nos gusta vestir de forma correcta y fiándonos en algunas marcas (Lacoste, Dockers, Gant, etc) mientras ellos, que teóricamente huyen de la marquitis, van a Larraitz, barrio rural a pies del Txindoki, a tomarse su salda dominical y pasear sus niños con el equipamiento de alta montaña como para hacer cumbre en el Himalaya. Nos tachan de pijos a los que nos gusta tener un buen coche mientras ellos, que apuestan por el trans

Un sector agrario unido y activo

Imagen
Comprobaron en la prensa de ayer que la rebelión del sector forestal ante las últimas decisiones adoptadas por el Consejo de diputados en relación a la política forestal a impulsar desde la institución, sobre la que escribí la semana pasada, se materializaba en otra foto “impagable” del conjunto del sector (Asociación Forestal, ENBA, EHNE, Arefor, Secoma y Egurlandua) solicitando al diputado del ramo, Jon Peli Uriguen que abandone su cargo. Digo “otra” porque no hace muchos meses el conjunto del sector agrario guipuzcoano (los dos sindicatos, los dos centros de gestión y una veintena pasada de asociaciones y cooperativas) ofrecieron una muestra de fuerza por su unidad de acción que retumbó en los despachos de la plaza Gipuzkoa, además de desmontar numerosos clichés e inquietar a numerosos dirigentes políticos, pero principalmente a los actuales regidores del palacio foral, al comprobar que ambos sindicatos, hasta ahora irreconciliables, eran capaces de llegar a un

Quo vadis izquierda abertzale?

Imagen
d ice el refrán popular que los políticos suelen aplicar el "Todo por el pueblo pero sin el pueblo" y, aunque sé que el dicho no es aplicable al conjunto de los dirigentes políticos, no me negarán que estas últimas semanas, al menos en lo referente al sector primario, hemos tenido dos magníficos ejemplos de ello. El primero ocurrió en sede parlamentaria hace un mes cuando se debatió una moción del PP presentada por mi amiga Mari Carmen López de Ocáriz que, aunque esta vez no haya andado fina, tengo que reconocer que viene demostrando una sensibilidad especial para el sector agrario y un conocimiento del mismo que extrañaría a más de uno. Una iniciativa en la que se proponía que las escuelas agrarias se ubicasen dentro del Departamento de Educación y no en el de Agricultura, como defiende el actual Ejecutivo y la mayoría del sector agrario. Las escuelas agrarias históricamente han dependido del departamento de Agricultura y en su seno se imparte tanto la e