¡Sonría, por favor!
Un año más, el 1 de mayo, día de los trabajadores, es el elegido por la Mancomunidad Enirio-Aralar para abrir el acceso de los ganaderos a los pastos de montaña de la sierra de Aralar y valiéndose de este hecho, se suele organizar todo una jornada de actos, eminentemente festiva, con la que se pretende visualizar y socializar la labor de los ganaderos y la importancia que los pastos de montaña mancomunales tienen para los ganaderos que complementan con los pastos de montaña el aprovechamiento que durante el resto del año hacen de sus pastos propios en la parte baja de los valles. Conviene aclararlo para comprender que todo ello, el valle y la montaña, los prados mancomunales y las praderas particulares de fondo de valle, conforman un único conjunto que es inseparable y que por lo tanto, debe ser tratado como un todo. Por otra parte, una vez más, una cadena de distribución, MAKRO para más señas, en su centro de Oiartzun, ha vuelto a jugar sucio con la leche y ofertarla a un...