Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como Legorreta

Los caracoles y la innovación

Imagen
La Ascensión del Señor es la fiesta patronal de mi pueblo, Legorreta, que, eso sí, de forma sui generis, celebra los 3 jueves que antiguamente se decía que lucían más que el sol: jueves santo (actualmente la gente lo celebra camino a su destino vacacional), jueves de la Ascensión y el jueves de Corpus Christi que, en mi pueblo, lo celebramos en sábado para poder despendolarnos a gusto y tener el domingo para reposar. Pues bien, recibido el programa festivo caigo en la cuenta, un año más, que el programa, salvo cuatro detalles, es idéntico al del año pasado y si me apuran, al de las últimas décadas. Reflexionando sobre la cuestión, caigo en la cuenta, que las fiestas patronales para que alcancen la categoría de tradición deben ser idénticas, mantenidas en el tiempo y repetidas año a año porque es esta característica, su repetición, la que las hace que la gente las asuma como propias, como parte de sus vidas y por ello, toda renovación que supere lo meramente anecdótico, está

Comienza la “Operación bikini”

Imagen
Acaban de terminar las fiestas patronales de mi pueblo, Legorreta, y si bien es cierto que son muy pocos quienes asisten a la misa del jueves de La Ascensión del Señor (incluso hay gente que se piensan que las fiestas son dedicadas a una tal Santa Ascensión) mi primera reflexión es sobre la pervivencia de estas fiestas locales, vestigios de tradiciones que nos diferencian a unos de otros y en las que comprobamos el nivel de arraigo que tienen cada uno de los habitantes del municipio. Con el mayor respeto hacia el que lo haga, no alcanzo a entender a aquella gente que, en un claro ejemplo de desarraigo, se marcha de vacaciones en las fiesta de su pueblo pasando olímpicamente de participar en esas fiestas donde la convivencia y la participación en muchas de sus actividades son la base del éxito de las mismas. Quizás, esas mismas personas, prefieran asistir como espectador a actividades socioculturales organizadas por una empresa y patrocinadas por una multinacional de la be

GILIPUERTAS

Imagen
Personalmente, desconfío de todo aquel que tras vivir bastantes años en un mismo pueblo ni tiene amigos ni cuadrilla para tomarse unos potes en los bares de su pueblo. Algo hemos hecho mal si tras vivir año tras año en un pueblo no hemos sido capaces de socializarnos y conformar una cuadrilla, ese reducido grupo de incondicionales que tanto te insufla oxígeno cuando la situación general te ahoga como que te agobia cuando lo que necesitas es algo más de libertad de movimiento. La cuadrilla es así, están a tu lado, a veces excesivamente cerca, para lo bueno y lo malo, para cantarte las cuarenta y para recordarte, aún con su silencio, que eres uno de los suyos. Tranquilos, no es mi intención hablar hoy sobre la amistad pero sí que quisiera mencionar los cambios, profundos cambios diría yo, que se están produciendo en nuestra vida y que están cambiando radicalmente tanto nuestro día a día como nuestra concepción de la vida cotidiana. Cuando yo era pequeñito mis padres