Al lio
“Este año, NO nos vamos a liar”, así de simple, contundente, rotunda, previsible e inútil es la frase del año, la frase que inicia la campaña navideña en nuestra familia, cuando mi mujer se dirige a la madre que la parió, temiéndose su desembarco culinario, el de mi suegra, que cocina excesivamente bien y en cantidades pantagruélicas. Basta con acabar la frasecita para que todo, como quien no quiere, discurra por el camino recorrido en años anteriores y los preparativos culinarios navideños acaben, un año más, con una mesa a reventar de comida. Ahora bien, hablando de líos, hay que reconocerle la maestría a Luis Calabozo, director de la patronal láctea FENIL que, desde que hace unas semanas saltó a la palestra pública afirmando que sus industrias pierden competitividad, frente a otras industrias europeas, por la carestía de la leche y que, según él, además, aun teniendo la leche, de vaca, más cara de la UE, los ganaderos, como si fuese por capricho, están reduciendo, cuando no aban