Disfraces de Carnaval
Soy de la opinión que en el momento en que vivimos lo que importa es la juerga y la cuchipanda por lo que somos capaces de asimilar y fagocitar tanto tradiciones propias como ajenas que adaptamos rápidamente, despojándolas de todo aquello que sea serio y requiera esfuerzo y/o compromiso, quedándonos, única y exclusivamente, con la parte lúdico-festiva de las tradiciones. Asimilamos el Halloween yanqui despojándolo de todo sentido religioso y nos quedamos con la parte festiva de los disfraces, dulces, etc. mientras ninguneamos el autóctono Día de Todos los Santos que es triste y luctuoso sin margen alguno para el jolgorio. En los carnavales ocurre otro tanto, nos olvidamos que el Carnaval, originalmente al menos, no es más que la despedida a la carne en los días previos al Miércoles de Ceniza, fecha en la que comienza la Cuaresma que es un periodo de 40 días hasta el domingo de Ramos, día en la que comienza la Semana Santa y así, dejados de lado la abstinencia, recogimiento y a...