El vaso de la paciencia
No sé a usted cómo se le habrá quedado el cuerpo tras el domingo
electoral pero a mí, personalmente, peor que el cuerpo se me ha
quedado el alma (sensible que es uno) al observar la fortaleza
lograda por la ultraderecha que, incluso, ha llegado a superar la
barrera de los cincuenta diputados.
Su
mensaje ha calado en municipios con fuerte presencia de inmigrantes,
muchos de ellos municipios agrícolas con un sector productor y
transformador altamente dependiente de mano de obra extranjera; su
mensaje ha calado entre capas sociales ansiosas de más mano dura
ante la cuestión catalana como si la cuestión se solucionase con
sólo envolverse en la rojigualda y lo que más me duele, aunque no
me extrañe, su mensaje ha calado entre gente del campo y del mundo
rural que hartos de ser ignorados por el stablishment dominante hasta
el momento y vilipendiados por diferentes movimientos ecologistas y
animalistas, se han agarrado, como clavo ardiendo, a un mensajero que
ha sabido tocarles la fibra y ablandarles el corazón para así,
cosechar unos pingues resultados electorales.
Cabalgar
tal Curro Jiménez por campos de cereal y apelar a los toros y la
caza, más allá de apelar al corazoncito de la gente del campo y del
mundo rural, resulta ciertamente estéril si queremos hacer frente a
los numerosos problemas que tienen los territorios ignorados, los
pueblos ninguneados y los agricultores vilipendiados pero, tengo que
reconocer que, cuando menos, han tenido el detalle (por electoralista
que fuese el objetivo) de acordarse de los hasta ahora ignorados.
La
España ignorada, término que me gusta más que el de España
Vaciada, requiere de políticas integrales que vayan, entre otras
cuestiones, desde la ordenación territorial, políticas educativas,
socio-sanitarias, desarrollo económico, infraestructuras tanto
viarias, digitales, etc. y servicios culturales que hagan del mundo
rural un territorio atractivo para vivir y trabajar. Cuestiones, por
cierto, sobre las que poco profundiza la ultraderecha a la que
resulta suficiente con apelar al orgullo rural para lograr la
adhesión de la gente rural y dejar la concreción de sus políticas
para una vez logrado el poder.
Ahora
bien, conviene tener en cuenta que el rápido acuerdo logrado entre
PSOE y UNIDAS PODEMOS, escenificado en el abrazo entre Sánchez e
Iglesias, un abrazo de amistad más falso que un billete de 3 euros,
ha soliviantado el animo de mucha gente rural y de campo con sólo
pensar que determinados políticos de UP que coquetean con grupos
radicales del ecologismo y animalismo, puedan dirigir las políticas
públicas o cuando menos, incidir notablemente en las líneas
directrices del nuevo gobierno.
El
alineamiento de algunos responsables políticos progresistas con
expresiones radicales del ecologismo y animalismo son la gasolina que
utiliza la ultraderecha para incendiar las redes sociales, foros y
grupos de whatssap que usan las gentes del rural y para atraer a su
redil a gentes que, por lo demás, dado su carácter moderado y
conservador, poco tienen que ver con una ultraderecha que quiere
reventar, desde dentro, el sistema.
Soy
consciente de que dentro de los partidos progresistas, especialmente
en UP hay mucha gente sensible y comprometida con el mundo rural,
implicada en movimientos agrarios e iniciativas sensatas de
desarrollo rural pero, por unos cuantos insensatos y extremistas,
alineados con otros extremistas ecoanimalistas que minusvaloran y
denigran todo lo que huela a campo y pueblito, por la unión de estos
extremistas, en opinión de este humilde juntaletras, es lo que le
cierra las puertas del rural y se las abre a la ultraderecha.
La
gente del campo y de los pueblos está harta de ser ignorada y
ninguneada, desilusionada al ver que todos los planes de impulso y
desarrollo se centran en las urbes, que las ciudades son asimiladas
como la modernidad frente al pueblo que es sinónimo del atraso, que
las políticas de servicios (educativos, sanitarios, sociales, etc.)
establecen ratios imposibles de cumplir por estos pequeños
municipios y que consiguientemente se quedan sin servicios, que el
sector primario, inherente al mundo rural por el uso de tierras es,
en realidad, el sector colista en nuestra sociedad y así, suma y
sigue, hasta que rebose el vaso de la paciencia.
En
Euskadi, por otra parte, como he solido decirlo en otras ocasiones,
la realidad rural es bastante diferente a la del conjunto del Estado
pero no por ello debemos dormirnos en los laureles y aceptar como
bueno lo que, en verdad, es inadmisible. El mundo rural vasco tiene
numerosos problemas y la sociedad vasca, creo, tiene los mimbres
suficientes para fabricar un buen cesto.
La
actual tramitación de una nueva Ley de Desarrollo Rural es una
inmejorable ocasión para impulsar una reflexión del conjunto del
país sobre el mundo rural vasco y sobre la relación entre el mundo
rural y urbano. Para ello, necesitamos de una reflexión global y un
análisis compartido pero, porque no decirlo, también necesitamos de
un liderazgo político más audaz y valiente para que la cuestión
rural sea asumida por el conjunto de la clase política y por el
conjunto del país.
El
conjunto del país, y esto vale tanto para Euskadi como para España,
debe asumir que el futuro del país depende en gran medida del futuro
del mundo rural porque la desigualdad sea por género, por edad, por
nivel económico o por desequilibrio rural-urbano es el caldo de
cultivo de mayores problemas que terminarán, sí o sí, por reventar
en algún momento.
Xabier
Iraola Agirrezabala
Comentarios
a la crisis del clima "camelo climatico ",
no deja d ser sospechosa la radicalidad animalista , sin ecuanimidad y qe afecta a ganaderos , qe tbn tienen drcho a vivir,
y hace qe la gente rural se aparte de beneficios mayores para el medio rural
qe trae la izda qe intenta favorecer al pyme-autonomos antes qe a multinacionales y ricos como hacen ls demas partidos.
Tbn se aparta la gente d la ciudad, qe se siente atacada por no poder comer carne ,
ya qe un albañil no puede vivir de vegetales solo
aunque la carne se debe moderar , y no se debe consumir mas haya d loq e se vaya a qemar o produce enfermedad
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Si ls animales salvajes tiene drcho a vivir la gente tbn ,
y por tanto a defenderse :
ls animales salvajes atacan ganado y personas...debe haber ecuanimidad y vedas
Pero :
masacrar lobos y rapaces produce plagas d roedores y demas
masacrar conejos-etc hace qe ls lobos busquen ganado
descabezare de lider la manada hace qe ls lobos maten mas al tuntun
y ls cazadores han metido jabalies para justificar cazarlos ...y cn ello la peste porcina !
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Por tanto hay qe buscar la ecuanimidad y el equilibrio d la ecologia
para evitar males
que la ganaderia debe se extensiva y ecologica
ademas se debe intentar evolucionar como persona eticamente
todo ello por respeto a esas vidas qe se van a sacrificar .